FICHA DEL LIBRO
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Autor:
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Max Rhode (Sebastian Fitzek)
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Título:
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Escuela de sangre
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Traductor:
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Irene Saslavsky
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Editorial:
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Ediciones B
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Año de edición:
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2017
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Género:
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Thriller
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ISBN:
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9788466660709
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Páginas:
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304
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Sinopsis:
Simon y Mark son
incapaces de imaginar algo más horroroso que tener que trasladarse de Berlín,
la metrópolis, al páramo de Brandeburgo. Lo único que los adolescentes esperan,
con enorme expectación, son seis semanas de vacaciones de verano, pero su padre
les juega una mala pasada. Los ha inscrito en una escuela muy especial, situada
en medio de una isla boscosa y solitaria. En ella se enseñan las mismas
asignaturas que en el infierno…
Opinión personal:
Tan solo me bastó
ver la portada de esta novela para decidirme a leerla. A esto se sumó el que
fuera Sebastián Fitzek quien la firma bajo el seudónimo de Max Rhode, el
protagonista de "El proyecto Joshua", su anterior publicación. No he
tenido el placer de leer esta novela, pero creo que no es necesario porque
ambas son totalmente independientes. Hace bien poco me adentré en la obra de este mismo autor con "El pasajero 23" y necesitaba ahondar un poquito más en ella ya que, en general, me dejó un buen sabor de boca pero me supo a poco. Hoy os traigo mis impresiones sobre
Escuela de sangre, una novela inquietante y que esconde entre sus páginas algo
que puede causarte pesadillas…o quizás no.
Escuela de sangre
se inicia con un prólogo que nos pone en antecedentes, para después desarrollar
su argumento linealmente a lo largo de 49 capítulos de corta extensión (algunos de apenas un par de páginas). Todo
comienza a modo de diario escrito por un paciente hospitalizado en un
psiquiátrico que va a narrar, en primera persona, unos acontecimientos trágicos
que lo atormentaron y marcaron su adolescencia. Este inicio ya nos está
sugiriendo que algo realmente atroz va a suceder.
El argumento de la
novela gira en torno a la familia
Zambrowski, formada por el matrimonio y dos hijos en edad adolescente, que en
el año 1993 se trasladan desde la ciudad cosmopolita de Berlín a la boscosa y
rural Brandeburgo. La empresa del cabeza de familia quebró seis meses atrás y
se ven abocados a instalarse en la abandonada casa del abuelo paterno, que se
encuentra en un estado deplorable de total abandono. Allí pretenden comenzar de
cero, esperando que las cosas mejoren, pero por desgracia nada va a salir como
estaba previsto. En una de sus exploraciones por los alrededores de su nuevo
hogar, Max y Simon descubren el lago de Storkow, aunque más bien es un pantano,
en cuyo fondo hay oculto algo que nadie debería ver jamás, algo capaz de
voltear el alma por completo, de convertir sus vidas en una pesadilla de la que
no podrán escapar.
Después de haber leído
la sinopsis, comencé Escuela de sangre con la idea de que me iba a enfrentar a
una novela de terror puro y duro, pero una vez finalizada no me ha parecido que
el contenido se ajuste del todo a este
género. Creo que más bien podría encuadrarse dentro del thriller psicológico o, como mucho, al del terror light. De ahí que esta novela pueda suponer cierta
decepción para quien se acerque a ella con las expectativas de toparse con una
trama que acelere su ritmo cardíaco y respiratorio, capaz de provocarle
pesadillas. Lo que si contiene son ciertos elementos sobrenaturales que, personalmente, me han descolocado porque no me los esperaba y han hecho que algunas
escenas me recuerden a una serie de televisión de la cual no diré el título
para evitar spoilers.
He de reconocer
que la lectura de esta novela no ha resultado ser tan adictiva como pensaba
porque hay momentos en los que la tensión se esfuma, pero he disfrutado con
ella y, en general, me ha parecido entretenida. El comienzo de la historia es
algo lento, pero luego consigue ganar impulso y finalizar de un modo
escalofriante, capaz de poner la piel de gallina del lector, no por lo que
describe, si no precisamente por lo que sugiere. Una cosa de agradecer al autor es que, aunque
tiene la capacidad de hacer muy visuales la mayoría de las escenas, haya
eludido detallar algunas que se presuponen muy sangrientas, permitiendo que sea
el lector quien les de forma con su imaginación. Su desenlace es
totalmente impredecible y está muy bien justificado.
Escuela de sangre
está escrita con un estilo directo y un lenguaje sencillo y claro, de
lectura fácil, con predominio de diálogos y capítulos de corta extensión, lo
que posibilita que la lectura se agilice y fluya sola, ayudando a mantener el
interés del lector. La narración en primera persona es muy arriesgada,
pero resulta ideal para permitir el acceso a los pensamientos y decisiones del
personaje principal. Un punto de vista interesante para hacernos testigos de cómo va evolucionando y entender las decisiones de alguien que se vio
expuesto a una aterradora pesadilla capaz de volver loco a cualquiera.
El principal problema que he encontrado en esta novela han sido sus personajes, de los
que apenas conocemos detalles sobre su psicología, por lo que algunos de ellos me
han parecido algo planos impidiendo la posibilidad de empatizar con ninguno.
En resumen,
Escuela de sangre es un thriller psicológico o novela de terror light magistralmente
escrita y de lectura entretenida. Con cierta
tensión narrativa, aunque muy dosificada e insuficiente, la novela mejora a medida que avanzan sus
capítulos, haciéndose adictiva y leyéndose del tirón. Una historia desgarradora que no llega
a ser tan sangrienta como su título indica gracias a que el autor ha evitado realizar
descripciones con minuciosa precisión.
Y como siempre digo: esta es la opinión de una simple amante de la lectura, no de una crítica literaria.
Su autor:
Sebastian Fitzek (Berlín, 1971) escritor y periodista
alemán, dedicado a la novela de intriga y suspense y autor de gran éxito
internacional. Estudió Derecho y recibió su doctorado en Derecho de Autor.
Trabajó como editor y director de programas en varias estaciones de radio en
Alemania. Su primera novela, el thriller psicológico Terapia,
alcanzó en seguida el número uno en ventas de libros y fue nominada al premio
Friedrich-Glauser en la categoría de mejor novela debutante, siendo aclamada
por la crítica y los lectores por igual.
Sebastian Fitzek es
también uno de los pocos autores alemanes cuyas obras, traducidas a más de
veinte idiomas, se han publicado en Estados Unidos y en Inglaterra, países de
la novela de suspense por excelencia.
Me llamo la atención pero luego me dio pereza. Las reseñas que he leído de la son tibias y me alegro haberlo dejado pasar
ResponderEliminarMarina, me decepcionó tanto su novela El proyecto Joshua que no voy a repetir y tampoco veo que te haya entusiasmado. Así que no me la anoto.
ResponderEliminarBesos 😊😘
Pues me llamaba la atención al principio pero después de otras opiniones y ahora la tuya creo que no lo leeré.
ResponderEliminarUn beso
Por alguna objeción que le pones y por el comentario de Rosalía, creo que no me voy a animar.
ResponderEliminarUn beso.
Me encanta este autor, así que seguro que la leeré.
ResponderEliminarBesos
Lo tengo pendinte de lectura, a ver si le puedo hacer un hueco pronto. Un besote
ResponderEliminarComo no he leído nada del autor empezaré por otro título que este no me atrae especialmente
ResponderEliminarBesos
Tiene algo que me atrae, así que apuntado queda.
ResponderEliminarUn beso :)
Que el autor haya evitado describir con detalles ciertos pasajes no sé si tomarlo como un punto a favor o en contra: a favor para mí, que soy muy aprensivo, pero en contra por el título y el libro en sí, que es lo que prometía. Creo que lo dejaré pasar sin remordimientos.
ResponderEliminarUn besito.
Este lo dejo pasar. El proyecto Joshua no fue lo que esperaba y lo sobrenatural no es para nada de mi gusto.
ResponderEliminarBesos
Hola Marina,
ResponderEliminarHe leído muy buenas opiniones de El pasajero 23 y El proyecto Joshua lo tenía como pendiente... así que es un autor de esos que me gustaría conocer... y el tema de lo sobrenatural me gusta... así que... quizás en un futuro ...
A mí lo de los personajes así planitos es algo que me suele pasar con este autor (me he quedado loca cuando he visto que publicaba ahora con seudónimo) y, la verdad, nunca he terminado de cogerle el punto.
ResponderEliminarBesos.
Pues me había llamado la atención, pero ahora no sé... la dejo en la recámara.
ResponderEliminarBesos.
A mí, como a algunos que veo por arriba... no me llega a convencer del todo... y con la de lecturas pendientes que tengo, pues lo dejo pasar...
ResponderEliminarUn besazo
La portada me llama mogollón y si no es demasiado gore( jejej), puede que me anime con ella en un futuro. Un beso.
ResponderEliminarNo tiene mala pinta y el género me encanta pero al ser light y los personajes que no se llegan a conocer del todo...creo que de momento la dejo pasar que hay otras del autor que me atraen más.
ResponderEliminarUn beso
La portada desde luego es para lanzarse por ella y aunque al final te haya resultado un poco light a mi me atrae.
ResponderEliminarSoy fan de Stephen King y el terror, aunque sea light me gusta bastante, tomo nota del título. Besos
ResponderEliminarTengo mis dudas con este, El proyecto Joshua me desilusiono bastante así que no se si lea este, quizás solo por curiosidad finalmente igual caiga. Gracias por tu reseña.
ResponderEliminarUn abrazo!
Me gusta mucho Fitzek, así que aunque no sea puro terror, me la apunto para leerla más adelante :)
ResponderEliminarLa portada es cierto que llama mucho, pero el contenido no. Lo tendré en cuenta.
ResponderEliminarBesos,
Bibiana.
Hola guapa!
ResponderEliminarEn esta ocasión la dejo pasar, pues no termina de llamarme, aunque me gusta el thriller el terror no, aunque sea light. Gracias por la reseña. Besotes
Hola Marina! Ya te dije que le tenía muchas ganas y a pesar de esos peros, me apetece mucho leerla. A ver cuando puedo ponerme con ella.
ResponderEliminarBuena reseña, carinyet!
Un besito.
El terror no es un genero que me atraiga demasiado por eso prefiero leer alguna de las otras novelas de este autor. Besos
ResponderEliminar¡Hola! Pues no me importaría leer este libro, que el género me gusta mucho y me llama la atención como siempre. ¡Besos!
ResponderEliminarHola! Aunque no sea de terror, terror, tiene algo que no me llama la atención, igual esos sucesos sobrenaturales, no lo sé, pero este de momento lo voy a dejar pasar, no me imagino con él en las manos, jejeje.
ResponderEliminarBesos!
Me alegra que no sea terror terror porque la tengo pendiente
ResponderEliminarPues estoy dividido, por un lado me llama la trama, la ambientación siniestra, pero me echa para atrás que esté contado en primera persona y, sobre todo, que no hayas empatizado con ningún personaje, algo llamativo.
ResponderEliminarUn beso ;)
Aunque no lo leeré ya mismo porque veo que te ha resultado entretenido y ya, no me importaría leerlo ;)
ResponderEliminarBesitos
No tiene mala pinta pero no entra en mis planes de lectura por ahora.
ResponderEliminarSaludos
¡Holaa! Ohh, hasta que has mencionado al libro de Pasajero 23, no me había dado cuenta de que era el mismo libro y ese me llamó mucho, a ver si pronto lo leo, este también me llama porque no va mucho de terror, yo soy bien miedica jajaja. Grcias por la reseña :D
ResponderEliminar¡Beesitos! :3
Por ahora no me animo, tengo el anterior del autor, sin seudónimo, pendiente de lectura aún.
ResponderEliminarBesos
Ese 'light' me hace descartarla. Tengo demasiado pendiente que me atrae mucho más.
ResponderEliminarUn beso ;)
No me ha llamado nunca este autor y no sabría decir por qué así que hoy (menos mal) no me la llevo.
ResponderEliminarUn beso guapa!
A mi de terror no me van nada, por muy light que sea, por cierto se de que serie hablas, que la tengo que retomar porque me quede ya muy atras. Besos
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